miércoles, 16 de diciembre de 2009

LA MOTIVACIÓN: ¿Cómo motivar en tiempos de crisis?

La MOTIVACIÓN es una atracción hacia un objetivo que supone una acción por parte del sujeto y permite aceptar el esfuerzo requerido para conseguir ese objetivo. La motivación está compuesta de necesidades, deseos, tensiones, incomodidades y expectativas. Es decir, la MOTICACIÓN es el impulso que inicia, guía y mantiene el comportamiento, hasta alcanzar la meta u objetivo deseado.

Según Frederick Herzberg: "La motivación me indica hacer algo porque resulta muy importante para mí hacerlo".

Jones la ha definido como algo relacionado con: "La forma en que la conducta se inicia, se energiza, se sostiene, se dirige, se detiene, y con el tipo de reacción subjetiva que está presente en la organización mientras sucede todo esto".

Kelly afirma que: "Tiene algo que ver con las fuerzas que mantienen y alteran la dirección, la calidad y la intensidad de la conducta".

Stephen Robbins publica la siguiente definición de motivación: "Voluntad de llevar a cabo grandes esfuerzos para alcanzar las metas organizacionales, condicionada por la capacidad del esfuerzo para satisfacer alguna necesidad individual".



Modelos de motivación

Modelo de Expectativas.- Sostiene que los individuos como seres pensantes y razonables, tienen creencias y abrigan esperanzas y expectativas respecto a eventos futuros en sus vidas. Por lo que para analizar la motivación se requiere conocer lo que las personas buscan de la organización y cómo creen poder obtenerlo.




Modelo de Porter y Lawler.- Menciona que el esfuerzo o la motivación para el trabajo es un resultado de lo atractiva que sea la recompensa y la forma como la persona percibe la relación existente entre esfuerzo y recompensa.


Modelo integrador de Motivación.- Combina todo lo que se conoce sobre el importante y complejo fenómeno de la motivación: necesidades, impulso de realización, factores de higiene, expectativa, motivación, desempeño y satisfacción.


Pero,...,¿¿ ¿CÓMO MOTIVAR EN TIEMPOS DE CRISIS???


La crisis actual no sólo afecta la economía de las empresas, también al manejo de sus recursos humanos, que en medio de reestructuraciones y recortes de personal se muestran temerosos y menos productivos a causa del estrés.


En este panorama de nubarrones empresariales la comunicación efectiva y la motivación ayudan a despejar suspicacias y mejorar el clima laboral.


1. Sé honesto


Si tienes la reputación de ser una persona sincera, es un bien de inestimable valor, con el que siempre podrás contar cuando necesites mantener involucrado a tu equipo.


Si te equivocas tú o algún otro ejecutivo, es necesario que lo admitas. Si fracasan, acéptenlo. Esta honestidad le hará ganar la confianza del equipo y en los momentos buenos, te apoyarán; y en los malos, será más fácil que les comuniques malas noticias.


2. Cree lo que dices


Debes estar convencido de lo que les estás diciendo a tus empleados, si no ellos lo percibirán y puedes perder no sólo su confianza, sino su apoyo laboral.



3. Crea vínculos

Enfócate en posicionar a tu equipo en el centro de tu comunicación.

Los expertos recomiendan anticipar sus temores y aspiraciones, sobre todo cuando se aproximan cambios mayores o grandes reestructuras.

Procura además evaluar todos los escenarios de las acciones de la empresa para todos los involucrados, así lograrás informar e involucrarlos en la conversación.


No olvides responder a todas sus preguntas y objeciones. Finalmente nunca dejes de ser cuidadoso y mostrarle tu empatía.

4. Mantén un diálogo "de dos vías" : Feedback continuo.

Es importante generar tantas oportunidades de comunicación bidireccional como sea posible. Las discusiones de arriba hacia abajo no son suficientes.

También es necesario aceptar opiniones, ideas y preguntas de todos los integrantes del equipo.

5. Escríbelo

Refuerza tus mensajes enviándolos en todos los formatos que sean posibles: lo primero es decirlo personalmente, después hay que reiterarlo en mails, boletines, videos, etc. No olvides que los mensajes deben ser claros, coherentes y precisos.


6. Mide el impacto

La mejor forma de evaluar si estás o no logrando comunicar y motivar a tu personal es recibir una retroalimentación frecuente de tus colaboradores. Intenta establecer un proceso definido para esta calificación y atiende estratégicamente cada propuesta.

Escuchar las conversaciones de “radiopatio” puede servir de referencia para saber el avance, siempre y cuando se tomen con las reservas del caso.


¡¡¡¡MOTIVA A TU EQUIPO!!!!!!






Un saludo a tod@s.